Mi Mundo, Alma y Corazón

Una cita que prometía... y terminó siendo un desfile de excusas. Entre risas, ironía y firmeza, te cuento cómo descubrí que no es por el café: es por la energía. Una historia real con lecciones de autoestima, responsabilidad afectiva y cero tolerancia al disfraz emocional.

En este nuevo capítulo onírico, la Divina Femenina se manifiesta entre la niebla, el fuego y el dolor sagrado. Ella ofrece la copa de su verdad, su herida y su amor incondicional, sabiendo que tal vez no será aceptada. Este sueño, espejo del alma, revela la sabiduría de quien ha amado sin reservas y el coraje de quien se retira sin rencor. Una experiencia poética, ritual y emocional que acompaña el cierre de un ciclo y la apertura de una nueva visión espiritual.

En este viaje íntimo y transformador, comparto una experiencia que marcó profundamente mi útero y mi energía sexual. A través de un lazo energético no físico pero sí profundamente impactante, viví en carne y alma lo que significa llevar memorias que no son nuestras, que se imprimen en el cuerpo y alteran el ciclo sagrado de lo femenino. Esta es una historia de culpa, de despertar, de liberación… pero sobre todo, de alquimia.

Es mezcla de ira sagrada, herida ancestral, y al mismo tiempo, una fuerza profundamente liberadora. Es un grito del alma que ha estado en silencio demasiado tiempo, y que ya no se avergüenza de sentir, de romper, de renunciar a lo que duele. Lo que transmito no es solo dolor: ¡es poder!

En un rincón entre mundos, una mujer de alma antigua cruza la puerta roja del destino y se adentra en un viaje místico hacia su propia sanación. Guiada por una anciana sabia, atraviesa espejos del alma, sombras ancestrales y un lago donde todas sus versiones entregan el dolor heredado. En este relato onírico, la protagonista descubre que su fuego interno es su faro, que la culpa no le pertenece, y que su verdadero propósito es transmutar, no cargar. Como la flor de loto que e

“Corazón Intenso” es una carta visceral al alma sensible, a quienes sienten demasiado y han sido llamados “demasiado” por el mundo. Es un viaje íntimo a través de heridas, memorias, autoexploración y fuerza espiritual. Una declaración de amor propio, vulnerabilidad y poder. Este texto honra a la niña interna, a la mujer salvaje, a la que no se contiene ni se disculpa por brillar con fuerza. Porque ya no se calla el corazón que arde. Ya no se esconde la mujer que ama con todo.